Hay total implicación de todas las personas que llevan la academia.

«Hace tiempo que quería apuntarme a inglés, ya que después de dejar el colegio no había vuelto a estudiarlo ni usarlo ni nada. Tenía bastante respeto al elegir una academia, pero hoy se que he acertado. Profesores increiblemente competentes (nativos o filólogos) a parte de ser gente maravillosa, que hacen clases muy amenas con mucho cariño. La verdad que no me ha costado nada recordar lo que ya sabía y además aprender a una velocidad que no me imaginaba que puediera tener. A parte de la directora ser nativa de Irlanda, es un negocio familiar, con lo cual hay total implicación de todas las personas que llevan la academia. ¡Una gran elección sin duda de la que no me arrepentiré nunca!»